La encuestadora Rasmussen recientemente informó que el índice de aprobación al presidente Trump después de los conflictos en el Capitolio el miércoles, lejos de bajar ha aumentado considerablemente.
Tras los conflictos el miércoles en Washington DC cuando un importante grupo de infiltrados de izquierda ingresaron por la fuerza al Capitolio, el aparato mediático a disposición de los demócratas programó una enorme campaña de difamación sobre el presidente Trump, intentando imponer la idea que fue él el culpable y responsable del descontrol.
Las grandes redes sociales también cumplieron su rol en la imposición del falso relato, principalmente actuando por medio de la censura, al punto de llegar a bloquear de modo permanente las cuentas oficiales del presidente Trump en Twitter, Facebook, Snapchat, y Youtube, quitando a Trump las principales herramientas para poder comunicarse con sus seguidores y exponer su defensa a la catarata de agravios recibidos durante los últimos días.
A pesar de toda esta situación, la encuestadora Rasmussen, que fue una de las más precisas durante las últimas elecciones, anuncia que la aprobación del presidente Trump en realidad está aumentando después de las protestas del miércoles.
Acorde a lo reportado por Rasmussen, durante la Navidad, la aprobación del presidente se encontraba en un 45% y continuó ascendiendo sin parar hasta posicionarse en un 47% justo un día antes de los conflictos.
Luego llegaron los incidentes y tras el ataque mediático sufrido por el presidente se esperaba que su aprobación descendiera, sin embargo una fuente cercana de Rasmussen, le dijo a Newsmax que la encuesta continua vio cómo la aprobación de Trump se disparó al 51% el jueves por la noche y se mantuvo por encima de ese valor.
“Los estadounidenses están disgustados porque las ciudades se quemaron durante meses y Washington y los medios de comunicación no hicieron nada”, dice la fuente de Newsmax, haciendo referencia a que los medios fueron cómplices de los disturbios durante todo el año, y ahora con total hipocresía pretenden acusar de violento al propio presidente Trump y sus seguidores, que siempre condenaron y advirtieron sobre la creciente violencia de los grupos de izquierda.
La sociedad en su conjunto evidentemente está notando que la información recibida a través de los principales medios de comunicación es tendenciosa y busca engañar a la gente para lograr imponer posiciones acorde a sus intereses respecto a todo lo que nos afecta.
Lo que sucedió el miércoles en el Capitolio fue realmente extraño. Es evidente que si hay una persona que se vería afectada por los disturbios que sucedieron ese día es el presidente Trump. ¿Qué motivo lo llevaría a él a orquestar semejante atropello? no existen argumentos lógicos que puedan incriminarlo. Y por más que los medios hegemónicos dicen todo lo contrario, la mayor parte de la gente no es ingenua y se da cuenta de esto.
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